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Sólo aplicable al Perú.
El Currículo Nacional de la Educación Básica es
uno de los instrumentos de la política educativa de la Educación Básica del
Perú. Muestra la visión de la educación para los estudiantes de las tres
modalidades de la Educación Básica: Educación Básica Regular, Educación Básica
Especial y Educación Básica Alternativa. Le da un sentido común al conjunto de
esfuerzos que el Ministerio de Educación del Perú realiza en la mejora de los
aprendizajes, desarrollo docente, mejora de la gestión, espacios educativos e
infraestructura.
Competencia n° 2
Se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad
El estudiante
comprende y toma conciencia de sí mismo en interacción con el espacio y las personas
de su entorno, lo que contribuye a construir su identidad y autoestima.
Interioriza y organiza sus movimientos eficazmente según sus posibilidades, en
la práctica de actividades físicas como el juego, el deporte y aquellas que se
desarrollan en la vida cotidiana. Asimismo, es capaz de expresar y comunicar a
través de su cuerpo: ideas, emociones y sentimientos con gestos, posturas, tono
muscular, entre otros.
Capacidades
Esta competencia
implica la combinación de las siguientes capacidades:
• Comprende su
cuerpo: Es decir, interioriza su cuerpo en estado estático o en movimiento
en relación al espacio, el tiempo, los objetos y demás personas de su entorno.
• Se expresa
corporalmente: Usa el lenguaje corporal para comunicar emociones, sentimientos
y pensamientos. Implica utilizar el tono, los gestos, mímicas, posturas y movimientos
para expresarse, desarrollando la creatividad al usar todos los recursos que ofrece
el cuerpo y el movimiento.
Estándares de
aprendizaje
Descripción del nivel de logro de la competencia:
Estándares Nivel 1 (Nivel esperado al
final del ciclo I)
Se desenvuelve de
manera autónoma a través de su motricidad cuando explora y descubre desde sus
posibilidades de movimiento las partes de su cuerpo y su imagen corporal.
Realiza acciones motrices básicas en las que coordina movimientos para
desplazarse y manipular objetos. Expresa corporalmente a través del gesto, el
tono, las posturas y movimientos sus sensaciones y emociones en situaciones
cotidianas.
Estándares Nivel 2 (Nivel esperado al
final del ciclo II)
Se desenvuelve de
manera autónoma a través de su motricidad cuando explora y descubre su lado
dominante y sus posibilidades de movimiento por propia iniciativa en
situaciones cotidianas. Realiza acciones motrices básicas en las que coordina
movimientos para desplazarse con seguridad y utiliza objetos con precisión,
orientándose y regulando sus acciones en relación a estos, a las personas, el
espacio y el tiempo. Expresa corporalmente sus sensaciones, emociones y
sentimientos a través del tono, gesto, posturas, ritmo y movimiento en
situaciones de juego.
Área curricular
Nivel Ciclo
Edades Área curricular
-----------------------------------------------------------------------------------------
Educación
inicial I 0 - 2 Psicomotriz
Educación
inicial II 3 - 5 Psicomotriz
-----------------------------------------------------------------------------------------
Área
Psicomotriz
Todas
las personas, desde que nacemos, actuamos y nos relacionamos con el entorno a
través de nuestro cuerpo. Con este nos movemos, experimentamos, comunicamos y
aprendemos de una manera única, acorde a nuestras propias características,
deseos, afectos, necesidades, estados de ánimo y demás. Esto da cuenta de la
dimensión psicomotriz de la vida del hombre; es decir, de esa estrecha y
permanente relación que existe entre el cuerpo, las emociones y los
pensamientos de cada persona al actuar.
Desde
los primeros meses de vida, el cuerpo y el movimiento son el principal medio
que los niños y las niñas emplean para expresar sus deseos, sensaciones y
emociones, así también para conocerse y abrirse al mundo que los rodea. De esta
manera, el bebé va adquiriendo progresivamente las primeras posturas –como
pasar de boca arriba a boca abajo o viceversa, sentarse, arrodillarse y
pararse– hasta alcanzar el desplazamiento y continuar ampliando sus
posibilidades de movimiento y acción.
Al
mismo tiempo, es a través de estas vivencias que el niño va desarrollando un
progresivo control y dominio de su cuerpo reajustándose corporalmente
(acomodándose) según sus necesidades en las diversas situaciones cotidianas de
exploración o de juego que experimenta. Es a partir de estas experiencias y en
la constante interacción con su medio que el niño va construyendo su esquema e
imagen corporal; es decir, va desarrollando una representación mental de su
cuerpo y una imagen de sí mismo.
En
medio de este proceso, es necesario tomar en cuenta que los niños y las niñas
son sujetos plenos de emociones, sensaciones, afectos, pensamientos,
necesidades e intereses propios, los cuales, durante los primeros años, son
vividos y expresados intensamente a través de su cuerpo (gestos, tono,
posturas, acciones, movimientos y juegos). Así, esto da cuenta de esa
vinculación permanente que existe entre su cuerpo, sus pensamientos y sus
emociones.
El
logro del Perfil de egreso de los estudiantes de la Educación Básica Regular se
favorece por el desarrollo de diversas competencias. El área Psicomotriz
promueve y facilita que los niños y niñas desarrollen la siguiente competencia:
“Se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad”.
Enfoque
que sustenta el desarrollo de la competencia en el Área Psicomotriz.
El
marco teórico y metodológico que orienta la enseñanza y aprendizaje para el
desarrollo de las competencias relacionadas con el área, se sustenta en el enfoque
de la Corporeidad. Dicho enfoque
concibe al “cuerpo” más allá de su realidad biológica, porque implica hacer,
pensar, sentir, saber, comunicar y querer. De esta manera, asume que el
“cuerpo” se encuentra en un proceso constante de construcción de su ser; este
es un proceso dinámico y que se desarrolla a lo largo de toda la vida, desde el
hacer autónomo de la persona, y que se manifiesta en la modificación y/o
reafirmación progresiva de su imagen corporal, la cual se integra con otros
elementos de su personalidad en la construcción de su identidad personal y
social. Por ello, se valora la condición de la persona para actuar y moverse de
forma intencionada, a partir de sus necesidades e intereses particulares, y
tomando en cuenta sus posibilidades de acción en una interacción permanente con
su entorno.
Además,
el área utiliza conocimientos acordes y relacionados con las ciencias aplicadas
a la educación, por lo que no se busca desarrollar solamente habilidades
físicas en los niños, sino también su identidad, autoestima, el pensamiento
crítico y creativo, la toma de decisiones y la resolución de problemas, tanto
en contextos de actividad física como en la vida cotidiana. Es decir, desde
este enfoque se busca contribuir en su proceso de formación y desarrollo para
su bienestar y el de su entorno.
¿Cómo
se visualiza el desarrollo de esta competencia en los niños y niñas del nivel
de Educación Inicial?
Esta
competencia se visualiza cuando los niños y niñas se desarrollan motrizmente al
ir tomando conciencia de su cuerpo, y sus posibilidades de acción y de
expresión. Ello ocurre a partir de la exploración y experimentación de sus
movimientos, posturas, desplazamientos y juegos de manera autónoma.
Cuando
el niño tiene la posibilidad de actuar y relacionarse libremente con su
entorno, va probando por propia iniciativa determinadas posturas o movimientos
hasta dominarlos y sentirse seguro para luego animarse a intentar otros. De
esta manera, va desarrollando sus propias estrategias de coordinación y
equilibrio desde aquello que sabe hacer, sin ser forzado.
Todas
estas acciones, además, permiten al niño conocerse e ir afianzando el dominio
de su cuerpo, y el desarrollo y control de sus posturas, del equilibrio y la
coordinación de sus movimientos. Así también, su sentido de ubicación y
organización en razón a los objetos, al espacio, al tiempo y a las personas de
su entorno. Es decir, niños y niñas irán reajustándose corporalmente tomando en
cuenta los objetos que emplean o que están a su alrededor, el espacio en el que
se encuentran y del cual disponen, el tiempo que dedican a las actividades que
realizan (la duración, el término o el tránsito entre ellas), y considerando
también cómo se organizan en la interacción con sus pares y los adultos que los
acompañan.
Todas
estas vivencias contribuyen con la construcción de su esquema e imagen
corporal. Estas se desarrollarán de manera saludable si el ambiente que se
ofrece al niño es un ambiente cálido, oportuno, enriquecedor y que respeta sus
potencialidades, ya que ambas construcciones dependen de sus experiencias
vividas, y sus relaciones con otras personas y con su entorno.
Para
ello, es sumamente importante que el docente pueda acompañar al niño y la niña
en el desarrollo de esta competencia a través de la observación y el respeto
hacia sus propias potencialidades para expresarse y desenvolverse de manera
autónoma a través de sus movimientos, acciones y juegos. Por lo tanto, deberá
brindarle un ambiente seguro y objetos pertinentes que le permitan desplazarse,
moverse y descubrir sus propias posibilidades de acción; estar atento a sus
gestos, posturas, tono, ritmo, movimientos y juegos, los cuales expresan las
sensaciones, emociones, sentimientos y pensamientos de los niños y niñas. Esto
permitirá ofrecerles un acompañamiento oportuno, transformar el espacio e
incorporar nuevos materiales, en respuesta a sus intereses y necesidades de
expresarse con el cuerpo.
En
el desarrollo de la competencia “Se desenvuelve de manera autónoma a través de
su motricidad”, los niños y las niñas combinan principalmente las siguientes
capacidades: Comprende su cuerpo y Se expresa corporalmente.
Desempeños por edad Ciclo I
Desempeños
9 meses
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y se encuentra
en proceso hacia el nivel esperado del ciclo I, realiza desempeños como los
siguientes:
- Realiza
acciones y movimientos de manera autónoma –en los que expresa sus emociones–,
que le permiten adquirir posturas, desplazarse en el espacio, explorar su
cuerpo e interactuar con el entorno: pasa de la posición boca arriba a boca
abajo o viceversa, se coloca de lado o semisentado, y manipula objetos que son
de su interés.
- Manifiesta las sensaciones que percibe de su cuerpo, y da
muestra de que reconoce algunas partes del mismo, a través de gestos, movimientos
y al responder a las solicitudes que surgen en la interacción cotidiana con el
adulto que lo cuida. Ejemplo: Un bebé, durante el cambio de ropa, extiende sus
piernas cuando el adulto que lo atiende se lo solicita.
Desempeños
18 meses
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y se encuentra
en proceso hacia el nivel esperado del ciclo I, realiza desempeños como los
siguientes:
- Realiza
acciones y movimientos de manera autónoma –en los que expresa sus emociones–,
que le permiten adquirir posturas, desplazarse en el espacio, explorar su
cuerpo e interactuar con el entorno: se sienta, gatea, se para y da algunos
pasos apoyándose en un elemento fijo, manipula objetos que son de su interés y
al hacerlo demuestra mayor precisión en los movimientos de su mano.
- Manifiesta
las sensaciones que percibe de su cuerpo y da muestras de que reconoce las partes
de su cuerpo a través de gestos o acciones, y se reconoce a sí mismo cuando
observa su imagen en el espejo. Ejemplo: Un niño al darse cuenta de que la
imagen reflejada en el espejo, es él, se sonríe, hace algunos movimientos,
gestos y juega a aparecer y desaparecer.
Desempeños
24 meses
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y se encuentra
en proceso hacia el nivel esperado del ciclo I, realiza desempeños como los
siguientes:
- Realiza
acciones y movimientos de manera autónoma –en los que expresa sus emociones–,
que le permiten desplazarse por el espacio, explorar con su cuerpo e interactuar
con el entorno: camina con soltura y sin apoyo, se desplaza arrastrando o
empujando objetos, corre e intenta subir o bajar pequeñas pendientes, sube
escalones con el mismo pie y crea sus propias maneras para bajarlos.
- Realiza
acciones de exploración y juego, en las que utiliza ambas manos de manera
coordinada. Ejemplo: Un niño coge piedritas y juega a meterlas dentro una
botella.
- Manifiesta
sus sensaciones y necesidades corporales, y reconoce las partes de su cuerpo a
través de gestos, acciones y algunas palabras. Da muestras de que reconoce su
imagen al mirarse en el espejo o al mirar fotos en las que aparece.
Desempeños
36 meses
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y logra el nivel
esperado del ciclo I, realiza desempeños como los siguientes:
- Realiza
acciones y movimientos de manera autónoma –en los que expresa sus emociones–
para explorar con su cuerpo e interactuar con el entorno: corre, sube y baja
escalones alternando los pies, salta desde pequeñas alturas, experimenta con su
cuerpo el equilibrio y desequilibrio, hace giros, trepa y se desliza por
pequeñas pendientes con seguridad.
- Realiza
acciones de exploración y juego, en las que coordina movimientos de sus manos y
pies. Ejemplo: Un niño juega con una pelota e intenta patearla hacia un lugar
determinado.
- Manifiesta
sus sensaciones y necesidades corporales al mencionarlas en diferentes
situaciones de interacción, juego y cuidado cotidiano. Ejemplo: Un niño
solicita agua cuando tiene sed, avisa a un adulto cuando quiere ir al baño, se
lava las manos cuando las siente pegajosas.
Desempeños por edad Ciclo II
Desempeños
3 años
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y se encuentra
en proceso hacia el nivel esperado del ciclo II, realiza desempeños como los
siguientes:
- Realiza
acciones y movimientos como correr, saltar desde pequeñas alturas, trepar,
rodar, deslizarse –en los que expresa sus emociones– explorando las
posibilidades de su cuerpo con relación al espacio, la superficie y los
objetos. Ejemplo: Un niño juega a trepar un pequeño muro, camina intentando
mantener el equilibrio y salta desde cierta altura.
- Realiza
acciones y movimientos de coordinación óculo-manual y óculo-podal en diferentes
situaciones cotidianas y de juego según sus intereses. Ejemplo: Un niño desenrosca
la tapa de su botella, pela una fruta, y puede abrir y cerrar sus envases
colocándoles las tapas.
- Reconoce
sus sensaciones corporales, e identifica algunas de las necesidades y cambios
en el estado de su cuerpo, como la respiración después de una actividad física.
Reconoce las partes de su cuerpo al relacionarlas con sus acciones y nombrarlas
espontáneamente en diferentes situaciones cotidianas. Representa su cuerpo (o
los de otros) a su manera y utilizando diferentes materiales.
Desempeños
4 años
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y se encuentra
en proceso hacia el nivel esperado del ciclo II, realiza desempeños como los
siguientes:
- Realiza
acciones y juegos de manera autónoma, como correr, saltar, trepar, rodar, deslizarse,
hacer giros, patear y lanzar pelotas, etc. –en los que expresa sus emociones–explorando
las posibilidades de sus cuerpo con relación al espacio, la superficie y los
objetos, regulando su fuerza, velocidad y con cierto control de su equilibrio.
Ejemplo: Un niño, al jugar a perseguir y atrapar a su compañero, corre y
aumenta su velocidad, cambia de dirección al correr y salta pequeños
obstáculos.
- Realiza
acciones y movimientos de coordinación óculo-manual y óculo-podal, acorde con
sus necesidades e intereses, y según las características de los objetos o
materiales que emplea en diferentes situaciones cotidianas de exploración y
juego. Ejemplo: Un niño juega a poner un pie delante del otro sin perder el
equilibrio.
- Reconoce
sus sensaciones corporales, e identifica las necesidades y cambios en el estado
de su cuerpo, como la respiración y sudoración después de una actividad física.
Reconoce las partes de su cuerpo al relacionarlas con sus acciones y
nombrarlas espontáneamente en diferentes situaciones cotidianas. Representa su
cuerpo (o los de otros) a su manera, utilizando diferentes materiales y
haciendo evidentes algunas partes, como la cabeza, los brazos, las piernas y algunos
elementos del rostro.
Desempeños
5 años
Cuando el
niño se desenvuelve de manera autónoma a través de su motricidad y logra el
nivel esperado del ciclo II, realiza desempeños como los siguientes:
- Realiza
acciones y juegos de manera autónoma combinando habilidades motrices básicas
como correr, saltar, trepar, rodar, deslizarse, hacer giros y volteretas –en
los que expresa sus emociones– explorando las posibilidades de su cuerpo con
relación al espacio, el tiempo, la superficie y los objetos; en estas acciones,
muestra predominio y mayor control de un lado de su cuerpo. Ejemplo: Un niño
juega a caminar detrás de otro niño. Aceleran la marcha, inventan diferentes
formas de caminar, corren saltando, caminan hacia atrás, se impulsan y hacen
saltos largos, entre otros movimientos.
- Realiza
acciones y movimientos de coordinación óculo-manual y óculo-podal que
requieren mayor precisión. Lo hace en diferentes situaciones cotidianas, de
juego o de representación gráfico-plástica, ajustándose a los límites
espaciales y a las características de los objetos, materiales y/o herramientas
que utilizan, según sus necesidades, intereses y posibilidades. Ejemplo: En el
patio, un niño dibuja círculos en el suelo para jugar con canicas tratando de
hacerlas caer dentro de los círculos que dibujó.
- Reconoce
sus sensaciones corporales, e identifica las necesidades y cambios en el
estado de su cuerpo, como la respiración y sudoración. Reconoce las partes de
su cuerpo al relacionarlas con sus acciones y nombrarlas espontáneamente en
diferentes situaciones cotidianas. Representa su cuerpo (o el de otro) a su
manera, incorporando más detalles de la figura humana, e incluyendo algunas
características propias (cabello corto, largo, lacio, rizado, etc.).
Condiciones
que favorecen el desarrollo de la competencia relacionada con el área
psicomotriz
· Ofrecer
espacios amplios y despejados, dentro y fuera del aula, que permitan a los
niños experimentar libremente con su cuerpo desde sus propios intereses y
posibilidades de acción y movimiento.
· Proporcionar
materiales y/o mobiliarios pertinentes que posibiliten el juego y la
exploración a través de su cuerpo, sus posturas y movimientos –por ejemplo,
estructuras de madera a una altura adecuada para que los bebés tengan la
posibilidad de sujetarse y ponerse en pie (específicamente en Ciclo I), cajas o
cajones de madera donde los niños puedan meterse o jugar a entrar y salir,
telas, colchonetas, aros, llantas, túneles, hamacas, rampas, estructuras de
madera para trepar, entre otros.
· Conocer
las necesidades y características madurativas de los niños con relación a la
dimensión psicomotriz de su desarrollo, y respetar los procesos individuales y
las propias formas, ritmos y tiempos, para brindarles un acompañamiento
adecuado y oportuno, sin dirigirlos, presionarlos o apurarlos.
· Promover
que los niños y niñas puedan medir los riesgos por sí mismos al momento de
realizar sus diversos movimientos, posturas y desplazamientos; brindarles la
confianza y seguridad necesarias a través de nuestras palabras y lenguaje
corporal.
· Observar
a los niños y niñas durante sus juegos y movimientos prestando atención al
proceso antes que a la acción en sí misma; valorar su esfuerzo, su placer y sus
aprendizajes al enfrentarse a diversos retos motrices.
· Prestar
atención a las diferentes sensaciones y/o emociones que los niños expresan a
través de sus gestos, tono, posturas, movimientos, desplazamientos y juegos, lo
que nos permitirá conocerlos y, a partir de ello, realizar las modificaciones
necesarias, tanto en relación a nuestras actitudes y acompañamiento, como en la
planificación y organización del espacio y materiales.
· Favorecer
espacios de diálogo, después de los tiempos de juego y movimiento, donde los
niños puedan hacer uso de la palabra para comunicar espontáneamente aquellas
sensaciones y/o emociones que han experimentado a través de su cuerpo,
posturas, movimientos y desplazamientos. En el caso de Ciclo I, con los bebés
que aún no hablan, es el adulto quien debe estar atento para recibir y
reconocer estas diferentes emociones y sensaciones, y darles lugar a través de
la palabra; por ejemplo, al ver a un bebé que disfruta mucho gatear y lo hace
recurrentemente por todo el espacio para explorar, el adulto le puede decir:
“veo que te ha gustado mucho gatear por todo el espacio”
· Promover
el respeto de los límites y pautas de cuidado al moverse libremente –tanto con
relación a sí mismo, como a los demás; tomando en cuenta el material, el
mobiliario y el espacio del que disponen–. Por ejemplo, conviene delimitar
claramente el espacio en el que los bebés pueden desplazarse para explorar
libremente, promover que los niños puedan avisar antes de saltar para evitar
accidentes, y asegurarse de que el espacio esté libre.
Fuentes:
Ministerio de Educación (2017).
Currículo Nacional de la Educación
Básica. Ministerio de Educación. Lima - Perú.
Ministerio de Educación (2017).
Programa Curricular de Educación
Inicial. Ministerio de Educación. Lima - Perú.